![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhg8vK6uEpuuZJxf5zieCvGuRcYnlbAqjiKiog-34vDnSd20rj0hngFly7Fe4WVHhXsGaHTQu5XSysKn7G6qVUzwth_xvWpMciEAdxeBDDEhbHigXrhc4e2eYHHWY8Se_QHbLdsW-TtvIuk/s1600/Francisco+1.jpg)
La acción de paz y la asistencia humanitaria de los organismos católicos son ''expresión fiel del amor de Dios por sus hijos que se encuentran en la opresión y la angustia. Dios escucha su grito, conoce sus sufrimientos y quiere liberarlos, y vosotros le prestáis vuestras manos y vuestra capacidad...Esta reunión constituye una ocasión propicia para individuar formas oportunas y estables de colaboración ...para organizar cada vez mejor vuestros esfuerzos para sostener las iglesias locales y a todas las víctimas de la guerra, sin distinción étnica, religiosa o social''.
Francisco lanza de nuevo un llamamiento a las conciencias de los protagonistas del conflicto, de las instituciones mundiales y de las opinión pública y afirma: ''Todos somos conscientes de que el futuro de la humanidad se construye con la paz y no con la guerra; la guerra destruye, mata, empobrece a los pueblos y a los países. Pido a todos que teniendo en cuenta el bien común permitan inmediatamente la obra de asistencia humanitaria, que silencien cuanto antes las armas y se comprometan a negociar, poniendo en primer lugar el bien de Siria y de todos sus habitantes, también de aquellos que han tenido que refugiarse en otros lugares y que tienen derecho de regresar lo antes posible a su patria. Pienso en particular en las amadas comunidades cristianas, rostro de una Iglesia que sufre y espera. Su supervivencia en todo Oriente Medio preocupa profundamente a la Iglesia universal: el Cristianismo debe seguir viviendo allí donde están sus orígenes''.
No hay comentarios:
Publicar un comentario