A las 18:00 horas en punto del 12 de octubre, las campanas de la Parroquia de San Pedro de Sevilla, comenzaron a repicar y anunciar a Sevilla que la Santísima Virgen del Pilar, Patrona de Zaragoza y de la Hispanidad estaba a punto de reunirse con sus devotos. A las órdenes de Antonio Santiago, los costaleros pusieron en la calle de Sevilla el paso de la Santísima Virgen del Pilar.
Acompañados de las Hermandades de San Pedro y Juan de la Palma, la Santísima Virgen fue paseando su Triunfal realeza por la zona de San Pedro. La primera Iglesia a visitar fue San Juan de la Palma. De aquí a la calle Amparo, donde la Divina Pastora de las Almas la esperaba. Canto del Salve Madre y continuar recorrido hasta llegar a la Plaza del Pozo Santo, donde la esperaban los ancianos que las Hermanas del Pozo Santo tienen en su Residencia. De nuevo vítores a la Santísima Virgen del Pilar y a la Guardia Civil.
Del Pozo Santo llegó la procesión hasta Santa Ángela de la Cruz y de aquí a su Templo Parroquia, poniendo punto final a la salida triunfal de la Santísima Virgen.
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