
«Pero por ironía del destino no sucedió como yo pensaba y nos involucramos concretamente y hoy ella está embarazada y yo quiero asumir la paternidad», continuó ante los atónitos feligreses de la parroquia Nuestra Señora de la Concepción, en Gaviao.
Moreira conoció a la joven, que hoy tiene 23 años y trabaja como secretaria de una escuela, en 2007, cuando aún era seminarista. Luego del anuncio a los fieles, «quedé emocionado y lloré mucho, casi toda la iglesia lloró», dijo el hasta hoy sacerdote.
La pareja planea casarse por la Iglesia, pero para eso necesita una autorización del papa Francisco, que visitó a fines de julio Brasil para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).
No hay comentarios:
Publicar un comentario