La localidad sevillana de Cantillana conmemoró el 175 Aniversario de la llegada de la Sagrada Imagen de la Asunción a la localidad. Se da la circunstancia que esta Imagen de la Madre de Dios subiendo al cielo, es una de las mayores devociones de Cantillana y cada 15 de agosto los cantillaneros se vuelcan con su Asunción. En esta ocasión fue en febrero y el calor estival se trasladó a frío invernal, aunque ese no fue motivo para que el fervor popular caldeara el traslado de la Santísima Virgen por las calles de Cantillanas.
A las 10:00 horas se abrían las puertas de la Parroquia de la Asunción, para dar paso al cortejo que acompañaba el traslado de la Sagrada Imagen de la Asunción hasta el Altar instalado para la Misa Estacional que presidió el obispo Auxiliar de Sevilla, Santiago Gómez Sierra en la Plaza del Llano, donde llegó la Imagen poco antes de las 12:30 horas. Una Misa Estacional conmemorativa de la llegada de la Asunción a Cantillana hace ahora 175 años, concretamente en 1840.
Cuenta la tradición cantillanera, que en 1839, la mayordomía de la Hermandad decide que la devoción se centre en el Sagrado Misterio de la Asunción al Cielo de la Santísima Virgen. Esta decisión fue presentada al Arzobispo de la época quien acepta la petición ese mismo año y se toma la decisión que la Sagrada Imagen de la Asunción presida el retablo mayor de la parroquia que lleva su mismo nombre.
Un año más tarde, en 1840, llegaba la Imagen de la Asunción a Cantillana. Imagen del siglo XVI de autor anónimo fue recibida en el pueblo con repique de campanas y acompañamiento ciudadano que daban la bienvenida a la que hoy ocupa la gran devoción a la Madre de Dios.
La conmemoración de los 175 años de la llegada a Cantillana fue precedido por la restauración de la Imagen. Una restauración que duró algo más de un mes, durante el cual los cantillaneros han ocupado su tiempo en arreglar al bóveda del Camarín de la Virgen y el mantenimiento de su retablo mayor, así como la confección de adornos conmemorativos de la llegada de la Virgen.
A las 24:00 horas del viernes 13 de febrero, la Sagrada Imagen de la Asunción de Cantillana llegaba puntual a la Parroquia de su mismo nombre donde fue entronizada en su paso procesional y preparada para su Salida Extraordinaria de traslado al Altar y la posterior procesión de regreso.
Tras la Misa Estacional comenzó la procesión extraordinaria por las calles engalanadas para la ocasión. La Santísima Virgen recibió, entre vítores y aplausos, el cariño de todo un pueblo que la acompañó hasta las 20:00 horas que entraba en el Templo Parroquial. Diez horas siendo aclamada, vitoreada, cantada y, lo más importante y principal, querida por su pueblo.
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