Manos Unidas de Valencia financiará este año la construcción de un internado para niñas en la Diócesis de Chanda en la India

Manos Unidas de Valencia, con la colaboración de las parroquias de Xàbia y Gata de Gorgos, financiará este año la construcción de un internado para niñas en la diócesis de Chanda, en el estado de Maharashtra en la India. El proyecto está incluido dentro de los programas de desarrollo para la educación que tiene la diócesis de Chanda en este estado desde hace varios años, según indicaron ayer fuentes de Manos Unidas. 

“La iniciativa de este internado de 234 metros cuadrados surge a raíz de las malas condiciones en las que viven un total de 62 niñas y para resolver los problemas de antigüedad y vejez del edificio”, han añadido. 

Actualmente, existe una planta baja que es el dispensario médico de la zona financiado también por Manos Unidas. El proyecto consiste en la construcción de las plantas primera y segunda, una para dormitorios y comedor y en la otra se construirá una gran sala de estudio y dos terrazas al aire libre. 

Las niñas en la actualidad están viviendo en una habitación junto al convento de las monjas en la que no tienen ni seguridad ni higiene por la antigüedad del edificio. Por ello, por las grietas de la vivienda entran insectos y serpientes y durante la época de los monzones cae agua por el tejado. 

Los beneficiarios del proyecto, que tiene un presupuesto de 31.535 euros, son las familias de las castas más humildes, “muchas de ellas pertenecientes a los dalits, clase social inferior que ni siquiera pertenece al sistema de castas”.

Asimismo, “los padres de las niñas viven en el campo o en otros pueblos vecinos y por ello la única forma de acceder a la educación es gracias a la construcción de internados ya que en casa de parientes o amigos las jóvenes suelen ser explotadas física y sexualmente”.

Igualmente, en esta zona de la India no hay carreteras, transporte público ni sanidad y sus habitantes están expuestos a contraer enfermedades por la falta de higiene y nutrición, sobre todo las mujeres, niños y ancianos. Además, los habitantes viven privados de derechos y dignidad y “su principal fuente de ingresos viene de la agricultura que está muy poco desarrollada”, han explicado las mismas fuentes.